El Dungeón del Amor

Dentro de los sueños imposibles, al menos a corto plazo, está el que todo el mundo llama al más puro estilo "topicazzo" su Nidito de Amor, y a lo que yo llamo mi Dungeon del Amor.

¿Y esto a qué se debe? Se preguntarán muchos. Y muchos podrían responder "pues porque son frikis y tienen que llamar a su casa de forma rara". ¡Uy! ¡Casi! Acertaste en lo de que somos frikis. En realidad llamar así a mi "futura" casa es algo más literal de lo que muchos se podrían imaginar, y antes que nada, explicaremos el termino friki de "dungeon", sin limitarnos simplemente a traducirlo del inglés.

Dungeon: Del inglés "calabozo".

Como ya he dicho esto se nos queda un poco corto así que vamos a la traducción del frikiccionario:

Dungeon: Del friki "Catacumba larga y sinuosa llena de monstruos, trampas y tesoros fabulosos. También aplicable a un lugar con muchos pasadizos y puertas secretas. Los sotanos de un castillo se puede convertir en un dungeon en menos que canta una cocatriz. De hecho, es cualquier cosa que se pudiera adaptar al juego de tablero de HeroQuest <-- mítico, parafraseando a mi buen amigo Furgo"

¿Por qué lo de la literalidad? Pues es bien sencillo.

Ya que nuestros sueldos no nos van a dar para una casa muy grande (más bien minúscula), está claro que el ambiente será tan opresivo como el cubil de alguna bestia infernal. Por otro lado, a la media birrita le encanta tener cosas colgadas de las paredes, como dibujos, posters, hojitas (silvana tenía que ser :P), espadas, armas de gomaespuma, etc.

Luego vienen los datos escabrosos como que por ejemplo la nena se quiere hacer con un trono chungo de esos que venden en La Rosa Negra, y que alcanza la cifra de 1000 €, euro arriba, euro abajo. El casco de Sauron (600 €) también tiene que estar entre las agraciadas adquisiciones, así como un casco de Darth Vader (valor variable dependiendo de la cutrez o flipe) y un sable luz a juego (no podía faltar).

Pero ahí no queda la cosa, un espejo chungo con dragones circundándole, así como un baúl de maderace rústico para guardar disfraces, la zona de biblioteca (donde meter mis ingentes cantidades de libros de rol, juegos y comics). Hasta la tapa del váter tendrá un dragón (sí, los vendedores de la Rosa Negra no tienen piedad, ¡saben lo que nos gusta!).

La cocina estaría llena de especias y una nevera grandota donde guardar los alimentos que saciarán mi hambre de hobbit (o de troll, dependiendo de si hay sopa o no en el menú :S).

Todo muy bonito. Y con un poco de suerte en vez de un gato tendremos un pseudo-dragón, o un dragón ¡qué cojones! ¿Si han podido clonar dinosaurios por qué no crear bichos jugando a ser Dios? (Nota: Lo de Jurassic Park estaba basada en hechos reales ¿no?). Con un monstruo así seguro que no tenemos cucarachas, ni hormigas, ni ratas, ni visitas, ni vecinos, ni amigos... Bueno quizás no tengamos mascota, seguro que el mantenimiento de una mole así debe salir carillo.

Y hablando de caro, ¿quién va a pagar todo eso y enfrentarse a una hipoteca a 50 años? Pues espero que alguien se apiade de nosotros (preferiblemente un vendedor de lotería con buen tino a la hora de endosarnos billetes ganadores) y nos dé dinero a raudales, porque si no, lo llevamos claro...

En fin, ¡de sueños también se vive!